Historia

 

Historia del Consejo Estatal del Azúcar (CEA)


La caña de azúcar fue introducida en la isla por el descubridor Cristóbal Colón, procedente de las Islas Canarias, y a partir de ese momento ha mantenido una presencia constante en el quehacer económico de la nación.

A mediados del siglo XIX se introdujo la máquina de vapor, dando origen a la producción semi-mecanizada. El primer ingenio propiamente dicho se estableció al finalizar el siglo. El desarrollo de la agroindustria continúa en los albores del siglo XX, bajo el influjo de la inyección de capital foráneo, principalmente de fuentes alemanas e inglesas.

Al final de la década de los años 20, la industria azucarera nacional aparece concentrada en tres grupos: la Familia Vicini (nacional), la Cuban Dominicana y la South Porto Rican Sugar Company, entonces propietaria del Central Romana, que en la actualidad constituye el principal productor.

Durante la dictadura que rigió el país entre 1930 y 1961, Rafael L. Trujillo adquirió gran parte de las unidades privadas existentes y adicionalmente creó tres nuevos ingenios, entre ellos el de mayor capacidad. Así, al final de los años 50 el patrimonio azucarero del dictador quedaba integrado por una gran cantidad de ingenios azucareros.

Al ser liquidada la dictadura en 1961, el Estado quedó como propietario de los mismos, constituyéndose en el principal productor de azúcar del país, con cerca del 60% del total. El resto de la producción quedó distribuida entre dos productores privados: Central Romana, con un 30%, y Casa Vicini con un 10%.

En los años transcurridos entre 1961 y 1966 los ingenios de propiedad estatal estuvieron regidos por la Corporación Azucarera Dominicana, creada por la Ley Núm. 78, con ciertos errores propios de lo accidentado de la vida política y económica de esa época; y en el año 1966 se creó, mediante la Ley Núm. 7, el Consejo Estatal del Azúcar (CEA), como ente administrador del emporio azucarero, integrado en ese momento por los doce ingenios que pertenecieron a la familia Trujillo.

En los años finales de la década de los años 80, el CEA inició un proceso de diversificación que culminó con la desaparición de los ingenios Esperanza y Catarey, y con gran parte de sus tierras arrendadas a consorcios privados o transferidos al Instituto Agrario Dominicano.

En ambos espacios se crearon, además, sendos parques de zonas francas industriales que permanecen bajo control del CEA. Posteriormente, mediante la Ley Núm. 141-97, sobre Reforma de la Empresa Pública, se incluyó al Consejo Estatal del Azúcar en este proceso y se inició una fase de transformación de esta institución, la cual consistió en un saneamiento y eficientización de este organismo mediante el arrendamiento de los ingenios azucareros a empresas o Instituciones nacionales y/o extranjeras.

 

El Consejo Estatal Del Azúcar es una institución autónoma descentralizada del Estado Dominicano, fue fundado el 19 de agosto del año 1966, mediante la Ley No. 7, Emitido por el Presidente Dr. Joaquín Balaguer por la necesidad de contar con un organismo que administrara los ingenios y demás dependencias ligadas a la producción de azúcar Esto con el objetivo de la coordinación y el eficiente funcionamiento de los ingenios del Estado.

 

El CEA Hoy

Mantiene el control del Ingenio Porvenir, al igual que el Laboratorio Genético y la División de Ganadería y Boyada CEAGana y CEAGana– FIV, los cuales trabajan con el mejoramiento del ganado bovino de la República Dominicana, así mismo cuenta con la gerencia de Minas y Medio Ambiente, quienes controlan puntos de extracción de materiales como caliche, tosca, piedra coralina, arena, cascajo entre otras, para la construcción de carreteras, calles y caminos vecinales de nuestra nación. 

De igual forma cuenta con la Dirección Inmobiliaria, regente y protector de todos los terrenos del Consejo Estatal del Azúcar  pertenecientes al Estado Dominicano.